La Cámara del Crimen de Villa María impuso una pena de tres años de prisión efectiva a Pablo Daniel Oliva (32), quien fue hallado culpable del robo de diferentes elementos en Villa Nueva, que van desde salames y bondiolas hasta máquinas para cortar pelo.
Concretamente, este ciudadano nacido en Vicente López pero residente en Villa Nueva fue declarado coautor responsable de los delitos de “hurto calificado por el uso de llave verdadera en grado de tentativa” y “robo calificado por ser en banda y en lugar poblado, por escalamiento y por efracción”, así como autor de “hurto calificado por el uso de llave verdadera”, todo en concurso real.
Oliva, quien se desempeña como changarín y no registra condenas anteriores, permanece detenido desde el 2 de diciembre del 2023 y participó de este juicio abreviado por videoconferencia desde la cárcel de barrio Belgrano, con la defensa de la asesora letrada del Tercer Turno, Ivana Castoldi. En tanto, la pena fue impuesta por el juez Félix Martínez y como fiscal de Cámara se desempeñó Francisco Márquez.
Los hechos
Según pudo conocer Villa María Ya!, los hechos que llevaron a la detención y posterior condena de Oliva tuvieron lugar hacia fines del 2023, siempre en la vecina Villa Nueva. El primero aconteció en la noche del 16 de noviembre, cuando ingresó a un local comercial de avenida Carranza, robo diez kilos de salame, ocho bondiolas, cinco kilos de carne, cinco cuchillos tipo carnicero, y 30 mil pesos.
Trascendió que el ahora sancionado entró al patio desde un portón que estaba trabado solo con un pasador, se dirigió a una ventana donde el propietario dejaba escondida la llave de ingreso a la sala de desposte e ingresó a este espacio, desde donde sustrajo los productos antes mencionados.
El 17 de noviembre acudió con otro sujeto a un comercio de avenida Carranza, presumiblemente el mismo del día anterior, y utilizando el mismo modus operandi lograron ingresar al interior, aunque no pudieron robar nada, ya que en el interior estaban los propietarios, quienes procedieron a su aprehensión civil. En tanto, la otra persona huyó.
Finalmente, entre la noche del 1 de diciembre y la madrugada del día siguiente, Oliva y otros dos sujetos acudieron a una casa de calle Modesto Moreno, en el barrio Centro de la vecina ciudad. Para entrar escalaron una puerta de chapa, rompieron una reja y vidrios.
Ya en el interior, sustrajeron zapatillas, ropas, dinero, máquinas para cortar pelo, una tijera y otros elementos de peluquería, así como bicicletas y mochilas, para luego escaparse. Sin embargo, en los momentos posteriores terminó siendo detenido con estas pertenencias y ayer llegó a un juicio abreviado, donde le impusieron la citada pena de tres años de cárcel efectiva.
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