Acaba de concluir una audiencia en la que terminaron absueltos dos acusados de abuso sexual. El abogado defensor es Antonio Alarcos.
En el día de ayer dio comienzo en la cámara del crimen local una audiencia donde tenía involucrados dos hermanos Juan Carlos y Federico Buttiero, quienes venían acusados de dos hechos, uno solo imputado ambos hermanos y el restante eran tres hechos, todos de abuso sexual con acceso a carnal.
Se entró a la cámara con lo que denominamos un juicio común, donde íbamos a escuchar a los testigos y obviamente fue lo que pasó en el día de ayer, escuchamos a la supuesta víctima, hoy denunciantes solamente y a su esposo. Estaban previsto alrededor de diez personas más que prestaron declaraciones las cuales por por la este por el barrio Comisional de ellos se prefirió que se incorporen todos por la altura pasando este alegar inmediatamente lo cual lo hizo
Según indicó el abogado defensor, Antonio Alarcos, el fiscal de cámara pidió la pena de seis años de prisión para cada uno de los detenidos, pero lo que el hizo fue mostrar las inconsistencias que obraban en el expediente.
“Terminó obviamente primando la duda por sobre la certeza que se requiere en estos casos, terminaron hoy con muy buen tino y fundamentalmente son cuestiones que me hacen seguir creyendo en la justicia. Se declaró que estas personas denunciadas no tenían absolutamente nada que ver y se los absolvió a ambos.
¿Cuánto tiempo pasaron en la cárcel?
“Demasiado tiempo para terminar absorbiéndolos, pero bueno son los tiempos de la justicia. Pasó un año, un mes y un día exactamente para terminar proclamando que no tienen absolutamente nada que ver con los dichos de la denunciante”, resaltó el letrado.
No siempre la denunciante es la que tiene razón y menos apoyada en pericias que por ahí ayudan o deberían en lugar de colaborar para la investigación lo único que hacen es entorpecer.
Fue por un prueba de geolocalización, que los acusados, recobraron la libertad
La defensa, pudo presentar una prueba en audiencia, que no había sido incorporada en la instrucción, que es una prueba objetiva del lugar donde estaban los implicados.
“Esto viene del trámite originario, se llevó a cabo ante la fiscalía de segundo turno, donde por causas que desconozco no procuró la incorporación de pruebas”.
“Nosotros la teníamos pero lo tenía que hacer la fiscal de segundo tueno, al ver que en función del artículo cuatrocientos pedimos la incorporación de esa prueba objetiva que es la geolocalización para que se entienda donde estaba un teléfono y el otro al momento en que habrían ocurrido los hechos denunciados y finalmente fue en nuestro favor y yo creo que fue la llave para que obtuvieran su libertad“, concluyó.
