Comer carne en estas épocas es un privilegio de clase, no todos los argentinos accedemos a eso, pero otros fueron tan iluminados en esta vida, que se dan el lujo de hacerlo en pleno centro de Villa María.
Según advirtieron algunos testigos del hecho, además de la milanesa, también había papas al horno, una buena forma de acompañar a la carne ensobrada sobre huevo agitado y astillas de pan.
No nos queda bien claro si es una milanesa de carne o pollo, la cuestión es que el amigo Chimango almorzó a la vista de los vecinos en la esquina de La Rioja y Chile, una buena forma de “contar plata delante de los pobres”.