Palabra santa: “Consensos para eliminar la pobreza escandalosa”

El obispo Jofré Giraudo pidió “Consensos para eliminar la pobreza escandalosa” en la homilía por el Día de la Independencia en Río Tercero.

Samuel Jofré Giraudo pidió consensos para superar la “pobreza escandalosa, la emergencia educativa y la creciente inseguridad”

Fue durante la homilía en el acto provincial del Día de la Independencia que se celebró en la ciudad de Río Tercero encabezado por el gobernador Martín Llaryora.

El obispo de la Diócesis de Villa María al pronunciar la homilía reclamó humildad en la dirigencia, un diálogo franco y evitar el “insulto o la descalificación al que piensa distinto”.

“No desconocemos los problemas que nos aquejan. Pero por encima de todo está el regalo de tener un país rico en recursos naturales y talentos humanos”, destacó el obispo.

Es necesario que reconozcamos las grandes frustraciones y fracasos colectivos que padecemos”, dijo.

“Nos basta recordar la pobreza escandalosa. La emergencia educativa. La creciente inseguridad, y la tristeza de innumerables jóvenes que no ven futuro entre nosotros y emprenden el camino de la inmigración al extranjero”, cuestionó el obispo.

“La fe también aporta un aire de libertad, muy oportuno al conmemorar nuestra Independencia. ‘La verdad nos hará libres’, nos advierte Jesús”, expresó.

Y advirtió que “buena parte de nuestras derrotas colectivas se deben al imperio de la mentira entre nosotros. Necesitamos decir basta y empezar a vivir en la verdad”.

“La buena religión es realista. Cree en los milagros de Dios pero no en la magia de la superstición”.

“La Nación necesita consensos”

Sostuvo Jofré Giraudo que la Nación es un proyecto común.

Para concretarlo necesita de líderes honestos y capaces.

Pero no son suficientes.

Necesita consensos.

No debemos esperarlo todo de nuestra dirigencia política.

Son necesarios también muchos líderes educativos, sindicales, empresariales y religiosos.

Necesitamos la honestidad del pueblo y el efecto benévolo que nos una como país”, amplió.

“La buena vida religiosa puede hacer un buen aporte en este sentido, comenzando con la reconciliación y el perdón de nuestras mutuas ofensas”, dijo el obispo durante la homilía.

Fotografía de archivo